La epístola de los Efesios, presenta una variedad de problemas concernientes de la autenticidad y la destinación.

El tenía un cariño especial por la iglesia allí (Hechos 20:17-38). Esta carta a los Efesios es entrañablemente impersonal y falta de cariño. El autor no pasa mucho tiempo en salutaciones a individuos y hace una declaración curiosa, que los destinatarios habían oído de su ministerio (3:2). Para entender estas cosas, y también el hecho de que la carta contiene una cantidad de frases que no están presentes en las cartas de Pablo, los expertos sugieren que fue escrita por un admirante del apóstol, cubriendo una carta de la primera colección de la correspondencia del apóstol. Aunque esto no es imposible, es ciertamente improbable que dos personas en la iglesia primitiva fueran tan singulares en su genio nativo y en su entendimiento espiritual tan exaltado como el de Pablo. Aún mas extraño es la ausencia total de una evidencia histórica independiente por la existencia de ego como el del apóstol Pablo.

Hay muchas similaridades de las cartas de Colosenses y la de Efesios aunque con presencia de diferencias; es probable que las dos cartas fueron escritas en mas o menos el mismo tiempo, aunque tal vez por diferentes secretarios.

En cambio de ser entendida únicamente por los Efesios, pudo ser una circular para ser enviada a diferentes iglesias, de la cual Efeso era una de ellas; esto explica el por qué se parece a un mensaje o meditación mas que simplemente una carta de Pablo, también nos explica el por qué no trabaja con las necesidades de una congregación en particular. Tal teoría nos da base del hecho de que, como en los manuscritos anteriores, en éste las palabras Efeso o Efesos están ausentes de la salutación (1:1).

De todos modos quien escribió la carta o a donde se dirigió, Efesios es uno de los mas exaltados escritos del Nuevo Testamento. El tema es el eterno propósito de Dios en establecer una iglesia completa en Jesucristo. A través de varios fondos y nacionalidades, los miembros han sido llamados a una unidad, que está descrita como la edificación o templo de Dios (5:20-22), el cuerpo de Cristo (1:22-23), cono la novia de Cristo (5:23-32).

RESUMEN DE LOS EFESIOS

La carta tiene dos puntos principales: El doctrinal del capítulo 1 al 3:21, la otra oratoria del capitulo 4 al 6:24. Después de una breve salutación (1:1-2) el autor expresa su gratitud por todo lo que ha oído de la fé y la buena fé de sus lectores (1:3-14). Esto es seguido por una oración que puede llegar a ser una apreciación de los dones espirituales dados a los creyentes a través de la obra de Dios en Cristo Jesús (1:15-23). A los lectores les recuerda que como gentiles ellos han sido levantados de una muerte espiritual por la gracia , a un estado de vida espiritual por medio de la resurrección de Cristo (2:1-10); aunque anteriormente ellos fueron extranjeros del pacto de la promesa y sin Dios en el mundo, ahora están unidos con los Judíos que son creyentes hacia una misma estructura de la iglesia, cuya piedra angular es Cristo Jesús (2:11-22). Fue la buena voluntad de Dios de encargar al autor el proclamar lo que estaba oculto anteriormente a los concilios de Dios, en principal quienes eran herederos a las promesas hechas a los profetas, las promesas dadas (3:1-13). El ora por la continuación de Cristo en los corazones de ellos a través de la fé (3:14-19), y da adoración a Dios que sea gloria de la iglesia en Cristo Jesús por todos los siglos, para siempre (3:20-21).

En la segunda parte de la carta, el autor desarrolla las implicaciones del plan de Dios de juntar todo hombre y todas las cosas bajo la mayordomía de Cristo. El los anima a utilizar los dones espirituales para la edificación de un solo cuerpo cuya cabeza es Cristo (4:1-16). En su conducta personal, ellos tienen que romper claramente con las costumbres paganas, ignorancia y sensualidad. La vida cristiana significa vivir en conformidad con la riente de Dios y andar en los pasos de Cristo (4:17 a 5:20). En sus relaciones del uno al otro, una subordinación propia debía ser reconocida, basada en la ordenación de la iglesia de Cristo para con Cristo. Este principio sostiene la relación del esposo con la esposa, los hijos y los parientes, los esclavos con los anos (5:21 a 6:9).

La exhortación final anima a los lectores a colocarse la armadura completa de Dios (compare Isaías 11:5; 59:17) y combatir en una batalla sin miedo a las fuerzas espirituales de maldad en el universo (6:10-18). Con una apelación para las oraciones por él y una recomendación para Tychicus, quien llevaba la carta, el apóstol cierra con una bendición para todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor eterno (6:19-24).