CAPITULO 3
El Camino de la Cena del Señor
La Cena del Señor es una ordenanza conmemorativa para ser
observada por la iglesia en memoria del cuerpo quebrantado y la sangre
derramada de nuestro Salvador. 1 Corintios 11:24: “Haced esto en memoria de
mí.”
Solamente los creyentes bautizados tienen derecho a
participar de la Cena. La comisión dada
por nuestro Maestro incluye que los nuevos discípulos sean bautizados y luego,
“enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado” (Mateo 28:19,20).
Una de las cosas que el Señor ha mandado es la participación de la Cena Conmemorativa. Los nuevos discípulos deben primeramente ser
bautizados y después enseñados a observar las otras cosas han sido
mandadas. El participar de la Cena
antes del bautismo es violar esta ley; y si fomentamos la violación de esta ley
del Señor seremos participantes (leí pecado de aquellos (‘Líe lo hacen. por lo tanto la Comunión Abierta (sin
restricción) es un pecado-una transgresión de la ley del Maestro.
Hechos 2:41,42; “Asi que, los que recibieron su palabra
fueron bautizados; y se anadieron aquel dia como tres mil personas. Y perseveraban en la doctrina de los
apostoles, en la comunion unos con otros, en el partimiento del pan y en las
oraciones.”
Nótese el orden aquí indicado:
1. “Recibieron 51
palabra”-entonces eran discípulos.
2. ‘’Fueron batil izados
“——discípulos bautizados.
3. “Se añadieron aqtiel
dia”-miembros de la iglesia.
4. “Perseveraban en la
doctrina de los apóstoles-firmes en doctrina.
5. “En la comunión”-unidos
en la fe y cottfraternidad.
6. Finalmente, “en el
partimi~nto del pan”-participando de la Cena del Señor.
Fste es el orden divino, y ningún hombre tiene derecho a camhiarlo. Si observamos este orden tenemos Comunión
Restringida, doctrina por la cual los bautistas siempre han luchado.
Pablo prohibió a la iglesia de Corinto participar en la Cena
mientras continuaran las “disensiones” dentro de la membresía (1 Corintios 11:
14:16-20). Si la disensión interna en una iglesia la descalifica para participar
de la Cena, ¿qué se dirá de miembros de las distintas denominaciones rivales
que se junten para tomarla? El
participar de la Cena cuando existen disensiones o divisiones es violar la ley
concerniente a esta ordenanza del Señor. Si violar la ley es pecado, consecuentemente,
la Comunión Abierta es un pecado. Nosotros, por lo tanto, pecamos cuando
invitamos o estimulamos a personas de diferentes facciones o divisiones para
que se junten con el propósito de celebrar la Cena del Señor. ¿Está Cristo dividido?
En adición a estas restricciones, el individuo tiene que
examinarse a si mismo antes de tomarla (1 Cor. 11:28). El objeto de este examen
propio es cerciorarse de si se ha cumplido con todos los requisitos impuestos a
quienes participen. Algunos creen que el examen propio es el único requisito
para la Cena, cuando, en realidad, es solamente uno de los muchos
requisitos. El Nuevo Testamento enseña
la comunión restringida.